En este blog ya hemos tratado, en otras ocasiones, de la Navidad y de las tradiciones. Es más, cuando reflexionamos acerca de este ciclo invernal, lo condicionamos indefectible y directamente de tal manera, que es asumido como parte de nuestras “inveteradas” costumbres, por decir algo fuera de contexto. (más…)
Cantando villancicos en Akorda (Ibarrangelu, 1982). Fuente: Archivo Fotográfico de Labayru Fundazioa.
En el transcurso anual y especialmente, en las proximidades del invierno y sus rigores climáticos, grupos de necesitados postulantes deambulaban recorriendo casas y aldeas, solicitando de los moradores una licencia o donativos en especies o alimentos (huevos, chorizos, tocino, morcillas, nueces, avellanas, peras, manzanas, naranjas, etc.). Acto propio de la caridad cristiana o la hospitalidad tradicional de las gentes del mundo rural que solía ser compensada por los deseos de salud o prosperidad expresados cortésmente y agradecidos por los pedigüeños. (más…)
Hay que reconocer que poner el belén en casa o en la parroquia cuando llegan las navidades es una costumbre fuertemente arraigada en nuestra tierra. Cierto es también que esto no solo sucede en esta tierra vasco-navarra, sino en todo el mundo cristiano. Precisamente este mes de diciembre de 2023 se cumplen 800 años de aquel primer belén de la historia, un belén que fue viviente, de carne y hueso, excepto el Niño que fue una figurilla; sucedía esto en Italia a iniciativa de San Francisco de Asís. Es decir, fue aquel mes de diciembre de 1223 cuando la tradición belenista echaba a andar, inicialmente como belenes vivientes y poco después a base de figurillas; nacen estos como una herramienta pedagógica de los franciscanos para enseñar los pasajes bíblicos de Mateo y Lucas que narran la Natividad de Jesús a una sociedad que mayoritariamente no sabía leer. A partir de aquel momento fueron los franciscanos y las clarisas (rama femenina de los primeros) quienes van manteniendo y extendiendo esta tradición. (más…)
En casa nunca ha faltado salsa de nueces, intxaur-saltsea, por Navidad. La solía preparar nuestra amama Juli de Larrabetzu (Bizkaia). Aún tengo el recuerdo de entrar al caserío y encontrarla sentada cascando nueces. Jamás lo olvidaré.
La salsa de nueces se elaboraba durante todo el invierno, sobre todo en Bizkaia y Gipuzkoa, pues había muchos nogales en los montes y arbolados. Era, además, un plato consistente, ideal para calentar el estómago, un alimento saciante donde los hubiera. (más…)